El actual momento de movilización da cuenta de un proceso de reconstitución de la clase trabajadora como sujeto político social, ante un modelo, cuyas anomalías dejan escapar la rebeldía de trabajadores que, en el simple acto de movilizarse por alguna reivindicación, logran darse cuenta de la necesidad de marchar juntos, pero organizados. Esta es quizás la 1º gran lección del movimiento docente por el bono SAE. Las fisuras en la matriz del modelo capitalista demuestra que la afasia y el olvido de la lucha social no eran definitivas, los trabajadores nos reunimos en torno, primero a nuestros gremios, para luego, comprender que son posibles otras formas de organización, que dan cuenta de nuestras necesidades incluso emocionales. Es así como surgen colectivos de trabajadores, uniones sindicales, mesas de trabajo multigremial, etc. Síntomas de una clase trabajadora que no está dispuesta a soportar la cada vez más grande brecha entre lo que el modelo promete y lo que realmente cumple. Esta primera lección nos da paso a una cada vez más urgente segunda lección, a saber, la de reconocer la simbiosis entre empleador y estado, como contraparte de nuestras demandas. La tarea de los trabajadores organizados será, por tanto, la de comprender el camino que han de seguir nuestras movilizaciones, en contra de un empleador abusivo e inoperante (que para el caso es el municipio) y siempre lejos del estado, porque a fin de cuentas son lo mismo.
Por estos día hemos visto, cómo la alegría y la unidad de los trabajadores de la educación lograron superar el cerco comunicacional impuesto por esta contraparte que es el estado, demostrando a la opinión pública que un profesor luchando también está educando.
La rebeldía que late en el corazón de los profesores y profesoras de Chile y que parecía dormida, hizo erupción de Arica a Punta Arenas, demostrando que la rabia y el compromiso por una mejor educación todavía palpitan. Pero la lucha es más grande que el bono SAE, la lucha es por el fin de esta gran estafa que es la educación municipalizada, es por una educación estatal, gratuita y de calidad en todos sus niveles. La lucha es también por la unidad de los trabajadores, camino que comienza con gestos tan simples como la unión de los gremios y sindicatos y que deben multiplicarse de la misma forma en como se está llevando a cabo en esta comuna, en la que el sindicato 1 y 2, junto al colegio de profesores se unen para demostrar que la fuerza está de nuestro lado y no de lado del capital, para demostrar que el rigor intelectual y la disciplina en la acción, canalizan la rebeldía para que ésta se haga efectiva.
Por la unidad de los trabajadores…
¡Arriba los que luchan!.
Cristian Arenas, presidente del sindicato numero 1 Comudef.
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